Los gimnasios han sido uno de los sectores perjudicados por la crisis sanitaria y económica de la pandemia de coronavirus. Principalmente durante el periodo de confinamiento, pero también ante el temor de los usuarios por contagiarse en las instalaciones. Al haber un alto riesgo por la propia práctica deportiva y al realizarse en espacios cerrados.
Por este motivo, los gimnasios españoles han tenido que realizar un arduo trabajo para adaptarse a las necesidades actuales y para garantizar la máxima seguridad posible de sus clientes.
En este artículo vamos a explicar algunas medidas que han implantado estos negocios.
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Control de accesos y aforo
Los gimnasios han tenido que reducir el aforo y controlar los accesos para garantizar la capacidad. Debido a esta necesidad muchos gimnasios e instalaciones deportivas han apostado por la digitalización de estas tareas. “Hoy en día gracias a las nuevas tecnologías se facilitan tareas como las reservas. A través del móvil se puede consultar las horas libres de una pista de pádel, reservar cita con un entrenador personal o para practicar ejercicio en una sala de entrenamiento”, afirman desde GestiGym, empresa dedicada a la instalación y configuración de control de accesos y software de gestión deportiva. Unas ventajas que ofrecen las aplicaciones móviles e Internet que han permitido que la adaptación sea más fácil en materia de aforo y control de accesos.
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Apuesta por las clases online
Muchas instalaciones deportivas han cambiado las clases grupales por lecciones online. Cada uno desde su casa y a través de videollamadas grupales practican ejercicio bajo la supervisión de un entrenador y sin riesgo a contagio.
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Más entrenamientos al aire libre
Está demostrado que existe mayor riesgo de contagio en espacios cerrados, por eso otra opción que se ha instalado en muchos gimnasios es realizar más entrenamientos al aire libre en parques o zonas verdes. Los alumnos pueden practicar deporte en grupo manteniendo la distancia mínima de seguridad con sus compañeros y el propio instructor.
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Limpieza y desinfección de las máquinas y espacios
Uno de los cambios abismales en la reapertura de los gimnasios tras el confinamiento, la limpieza y desinfección de las máquinas y espacios. En algunos casos han optado por organizar diferentes turnos en las salas de entrenamiento, se debe reservar cita con anterioridad y entre turno y turno el personal de limpieza se encarga de la desinfección del espacio y las máquinas deportivas.
En otras instalaciones deportivas han optado porque sean los propios usuarios los que se encarguen de la propia desinfección de las máquinas tras su uso. Al terminar con un aparato los deportistas deben limpiarlo con desinfectante que hay habilitado en las salas para que el siguiente pueda utilizarlo con seguridad.
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Obligatoriedad del uso de toalla y distancia de seguridad
Entre las medidas que han tenido que adoptar los gimnasios es la obligatoriedad de que los usuarios de las instalaciones usen toallas y salvaguardar la distancia mínima de seguridad.
Se sabe que el coronavirus se puede contagiar a través de las partículas de sudor o saliva, por ello las instalaciones deportivas obligan a todos deportistas a usar toallas y a mantener la distancia mínima de seguridad. Así se disminuye la posibilidad de que el virus se propague a través de estas partículas.
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Medición de temperatura a la entrada de las instalaciones
Otra de las medidas aplicadas por muchos centros deportivos españoles es medir la temperatura a la entrada para evitar que todas aquellas personas con fiebre practiquen deporte. Una manera de evitar posibles contagios.
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¿Uso de mascarillas?
Actualmente no es obligatorio el uso de mascarillas en los gimnasios a no ser que las propias instalaciones así lo consideren oportuno. Y también en Madrid y Galicia, regiones en las que sus gobiernos autonómicos han establecido el uso obligatorio de mascarillas dentro de las instalaciones deportivas, incluso cuando se practique deporte de alta intensidad y se pueda mantener la distancia de seguridad. En el caso de Galicia existe la excepción de que no son obligatorias en la práctica de deportes que requieren pistas específicas, como puede ser el tenis, el pádel o el squash, tal y como informa el diario La Voz de Galicia en un artículo sobre esta nueva normativa que data de septiembre de 2020.
Esta noticia ha sido recibida en el sector como un golpe letal y se espera que no se extienda por el resto del país para que no se agrave la deficiente situación económica que están viviendo los gimnasios españoles.